jueves, 9 de septiembre de 2010

Buenas razones por las que llamarse Andrea

Esta es la típica situación en la que una pareja no se pone de acuerdo sobre el nombre que poner a sus futuros e hipotéticos hijos. Así, el hombre plantea nombres a diestro y siniestro...

...pero a la mujer que no le gusta ninguno.

Hasta que dice el hombre:
-Andrea
Silencio.
-Me gusta Andrea -contesta ella

El hombre suspira aliviado. Por fin acierta a dar un nombre que les guste a los dos. Pero en breve, la mujer lo saca de su error:
- Me gusta Andrea pero para un chico. - sonríe maliciosa, sabiendo que no es lo que él quiere oír.


(No me echéis toda la culpa, demos las gracias
por este malísimo gag del día a Manuel ^^)

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